Hay gente que aprovecha Carnaval como excusa para disfrazarse, dejar a un lado cualquier complejo, hacer el ridículo, desmelenarse y decir y hacer todo tipo de locuras que no haría el resto del año.
Pues me parece bien.
Si fuera por mí, les invito a que sean ellos mismos y se diviertan como niños todos los días del año, pero ya que no se atreven, pues almenos que aprovechen estos días.
No soy quien para obligar a nadie, pero aborrezco a los que no sólo no se disfrazan sino que además lo encuentran una tontería y se hacen los ofendidos del tipo: "¿disfrazarme? ¿yo? ¿por quien me has tomado?".
Desde aquí hago un llamamiento a todo el mundo para que se anime y se disfraze. Da igual que sea superoriginal, (algo como vestirse de rosa y ponerse una silla en la cabeza: "voy de chicle pegado a una silla") algo típico (pallaso, vaquero, colegiala) o algo más light (un sombrero de mago, o unas antenas, o unas gafas psicodélicas).
¡¡Poneros lo primero que pilleis, pero por favor, DISFRAZAOS!!!
Sería una lástima que se perdiera esta bonita tradición.
PD: Odio los disfraces de "fantasía". Si quieres ponerte plumas, ve de indio, pero no de pavo real!!
viernes, 1 de febrero de 2008
Suscribirse a:
Entradas (Atom)